Aceptar una herencia en España implica seguir una serie de pasos legales y administrativos que conviene conocer para evitar problemas. No basta con ser heredero por ley o por testamento: es necesario realizar ciertos trámites para que los bienes pasen oficialmente a nombre de los herederos.
El primer paso es obtener el certificado de defunción en el Registro Civil, documento imprescindible para iniciar cualquier gestión. Después, se debe solicitar al Ministerio de Justicia el certificado de últimas voluntades, que confirma si la persona fallecida dejó o no testamento y ante qué notaría.
Si existe testamento, habrá que acudir a la notaría correspondiente para obtener una copia autorizada. En caso de que no lo haya, los herederos deberán tramitar una declaración de herederos abintestato, también ante notario, para determinar quiénes tienen derecho a heredar según la ley.
El siguiente paso consiste en realizar un inventario de bienes y deudas del fallecido. Esto incluye viviendas, terrenos, cuentas bancarias, acciones, vehículos, así como posibles préstamos u obligaciones pendientes. Este inventario es clave para valorar si conviene aceptar la herencia, rechazarla o hacerlo a beneficio de inventario, que protege al heredero frente a deudas superiores al patrimonio recibido.
Una vez elaborado el inventario, se procede a la escritura de aceptación y adjudicación de herencia ante notario. En este documento se reparte formalmente el patrimonio entre los herederos y se adjudican los bienes concretos a cada uno.
Finalmente, los herederos deben cumplir con las obligaciones fiscales. En un plazo general de seis meses desde el fallecimiento, es necesario liquidar el Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones, regulado de manera diferente por cada comunidad autónoma, y la plusvalía municipal en caso de heredar un inmueble urbano.
En resumen, aceptar una herencia no es un simple trámite: requiere cumplir con varias gestiones legales y fiscales. Contar con la ayuda de un notario o abogado especializado en sucesiones puede ahorrar tiempo, conflictos y posibles sanciones por incumplimiento de plazos.
